Con el estrechamiento de márgenes desde hace unos años, las entidades financieras cobran prácticamente por todo.
Hagamos valer nuestra importancia como objeto de negocio para ellas. Cuando nos cobran una comisión por el motivo que sea, reclamemos con el siguiente argumento: «saca en tu sistema informático la rentabilidad histórica y actual que yo como objeto de negocio te estoy dando, y como verás que tienes margen suficiente y que te interesa que yo siga como cliente tuyo, devuélveme la comisión».
Se puede hacer, sólo hay que probarlo.
Si eres un cliente normal, con nómina, tarjeta y si encima te están financiando algo, siempre eres rentable. Si se niegan, cambia de entidad financiera, será que no hay…