La naturaleza está llena de plantas que pueden hacernos la vida mejor y ayudarnos a conseguir un equilibrio mayor en nuestro cuerpo y mente. Una de ellas es sin duda el té rojo Pu-Erh. La medicina tradicional china lo considera un remedio para gozar de buena salud y para adelgazar. Son tantas sus virtudes que en la antigüedad se la conocía como el Té de los Emperadores.
Las principales virtudes de esta infusión originaria de la región de Yunnan son:
- Desintoxica y depura activando el metabolismo del hígado.
- Refuerza el sistema inmunitario, preserva de las infecciones y reduce la reproducción de las bacterias.
- Ayuda a mejorar el estado de ánimo e incluso es beneficioso ante leves depresiones.
- Facilita la digestión de las comidas grasas y estimula la secreción de las glándulas digestivas.
- Disminuye el nivel de colesterol.
- Elimina el sobrepeso provocado por una mala alimentación.
El té rojo Pu-Erh es en realidad un té verde que adquiere sus peculiares características después de un proceso de maduración. Sus hojas son comprimidas y se almacenan en condiciones especiales durante años.
Para su preparación basta con 3 gramos de Pu-Erh añadidos a un vaso de agua hirviendo o muy caliente, dejándolo infusionar durante 2-5 minutos, dependiendo de la intensidad deseada.
Diversos estudios elaborados en China y Europa han confirmado su gran poder adelgazante. En el hospital St. Antoine de Paris, por ejemplo, de los pacientes estudiados el 88% perdió entre 3 y 10 kilos en cuatro semanas, manteniendo una alimentación normal (sin ninguna dieta especial) y tomando una media de tres o cuatro tazas de Pu-Erh al dia.
Mi experiencia al respecto, no es tan abrumadora como los resultados de este estudio, aunque tampoco mi rigurosidad al consumirlo regularmente. Pero la verdad es llevo de dos años consumiendo por lo menos una taza de té rojo al día, y al cabo de unos meses de empezar a tomarlo, comencé a perder peso sin cambiar en absoluto mi dieta. En estas cuestiones ya se sabe que cada persona es un mundo, pero conozco de mas experiencias que, por lo menos invitan a probarlo.
Por cierto, su sabor puede ser algo aspero o duro (terroso) para paladares no acostumbrados, pero es conveniente endulzarlo con azúcar moreno o jarabe de arce y nunca con azúcar refinado, puesto que este se convierte automáticamente en grasa al ser ingerido.
A modo de curiosidad, en China también es usado por vía tópica para quemaduras o afecciones de la piel y parece que los últimos estudios médicos indican que beberlo habitualmente también previene dos tipos de cancer de piel. Desde luego, vale la pena subirse al tren del Pu-Erh.
Vía: Innatia
3 diciembre 2008 15:09
La verdad es que hace unos años, antes de tener a mi hijo, tomaba bastante te rojo aromatizado con vainilla q está bastante más rico y yo tb adelgacé y me sentaba muy bien.
Pero lo deje pq tanto té me oscurecía los dientes (segun mi dentista).
Voy a volver a tomarlo ahora que me lo has recordado.
3 diciembre 2008 16:39
La primera vez que lo probé yo, me lo dió mi madre…y me pareció un sabor muy desagradable…y no fué hasta al cabo de un año, que lo volví a probar y desde entonces lo tomo solo con azucar moreno.
Tambien esta muy bueno con menta!
Un placer empezar a colaborar con vosotros el dia de mi cumpleaños por cierto! :D
Saludos!
7 diciembre 2008 14:39
deberé empezar a tomarlo pues! :P A mi me gusta más con menta… pierde un poco ese sabor terroso que no me acaba de convencer! :)
Besos!