Esta es una historia real que ocurrió en el año 2005 tras el tsunami y que nos demuestra que no hay diferencias insalvables cuando se trata de hacer el bien a los demás, y los protagonistas son un hipopótamo recién nacido, llamado Owen, y una tortuga centenaria llamada Mzee.
Todo ocurrió de la siguiente manera:
Un hipopótamo bebé de 300 kg, que sobrevivió a las olas del tsunami en la costa de Kenia, fue rescatado en mal estado de salud y deshidratado y llevado a la Reserva Natural de Mombasa.
Allí, y ante el asombro de todos, fue adoptado por una tortuga centenaria, que tiene un color gris oscuro similar al de los hipopótamos adultos, y establecieron un vinculo tan fuerte que se volvieron inseparables.
Nadaban, comían y dormían juntos. El hipopótamo seguía a la tortuga a todas partes como lo haría con su madre biológica, le lamía la cara y la protegía cuando alguien se acercaba a ella.
Las fotos hablan por si solas de su unión y la gran ayuda mutua que se dispensaron. Y aunque finalmente fueron separados, la tortuga, como el referente primario de ese bebé, desempeñó un gran papel en la vida del hipopótamo.
Si eso ocurre de forma casi anti-natura en especies totalmente diferentes ¿qué podríamos hacer juntos los seres humanos si fuésemos capaces de salvar pequeñas diferencias de piel, política o religión?
¿En qué se convertiría el mundo si nos uniésemos en proyectos comunes?
En una UTOPÍA real que pronto comprobaremos porque las adversidades futuras nos unirán hacia un frente común: la salvación de Gaia y el imprescindible cambio de paradigma.
Más información: BBC Mundo
En El Blog Alternativo: The Buscycle Project: todos vamos en el mismo barco
24 diciembre 2008 11:38
Preciosa historia.
Este blog es magnífico. Gracias!!!.
23 enero 2009 17:09
Es una linda historia…digna de ser difundida…
Si los hombres fuéramos así..no digo que todos…pero si esos pocos se multiplicaran, es que muchas veces no hay nada en el cerebro y seguimos con las diferenciaciones, racismos, mal trato etc etc etc..sin saber que no solo hace mal a los demás sino también a nosotros mismos…es que quizá solo los hombres sean capaces de destruir el mundo donde viven :(
2 octubre 2009 13:42
A mi me encantan este tipo de historias, desde siempre me han gustado los animales y me interesa la etología, el caso es que ahora está muy de moda explicarlo todo por la teoría del gen egoísta, y no, no todo se explica así, a mucha gente le cuesta aceptarlo porque siempre se intenta buscar la teoría definitiva que le dé una explicación a todO, pero a mi entender la biología no es matemáticas, es también emoción, asombro y descubrimiento, por lo menos para muchos que desde siempre nos ha gustado esto. También debo aclarar que me parece innegable que la teoría del gen egoísta aclara muchos comportamientos, pero no todos.
2 octubre 2009 14:04
Hola María Magdalena
Muchas gracias por tu aportación.
Tal vez te interesen estos artículos de un biólogo «disidente»: MÁXIMO SANDÍN
Saludos
8 octubre 2009 09:23
Hola!, quiero agradecerte el enlace, es realmente fascinante el cambio de punto de vista que plantean. Lo cierto es que sabía de antes que había biólogos muy críticos con las teorías de Dawkins por estremistas, pero pensaba que sus obejeciones se quedaban en ámbito académico, verlos expresarse «en vivo» es fascinante.
28 diciembre 2009 06:04
realmente una historia admirable, muy chévere, eso debemos apredner los humanos, ya que aveces nos matamos por tonterias de ideología o costumbres, mientras estos seres nos demuestran que hasta las barreras de especie son franquedas.
24 septiembre 2010 22:23
SOLO LOS HUMANOS NOSHERIMOS, NOS OFENDEMOS, NOS AGREDIMOS, NOS MENOSPRECIAMOS, PERO NOSOTROS TENEMOS EL RAZONAMIENTO, PERO LA INETELIGENCIA, LA TIENEN ELLOS!!!!!!
28 noviembre 2010 02:19
Como es posible que siendo animalitos nos enseñen sentimientos que nosotros como humanos nos gactamos de tener y no demostramos y ellos siendo diferentes nos dan un ejemplo que nos degan sin palabras
15 marzo 2011 14:25
Hola, quiero agradeceros muy explícitamente que me hayais dado a conocer a este señor, que está diciendo cosas muy coherentes y que ya era hora de oír.
Sobre el hipo y la tortuga, para mi lo interesante siempre ha sido no la actutud del cachorro, que es fácil de entender, sino la de la tortuga. ¿Por qué quiere estar con el hipo?, que me lo expliquen los neodarwinistas para los cuales todo son genes, reproducción y competencia.
15 marzo 2011 15:44
Gracias María Magdalena, tu comentario es de lo más alternativo que he leido en este blog en tiempo :)
al neodarwinismo se lo van a tragar los nuevos tiempos…
25 junio 2012 10:58
Que historia tan tierna! A ver cuando los humanos aprendemos a comportarnos con los animales! http://www.igualdadanimal.org