¿Has pensado alguna vez en cuanta energía se malgasta y como te complicas la vida fingiendo ser lo que no eres? Creo que todos, en mayor o menor medida, hemos fingido alguna vez. Si no es tu caso te felicito.
¿Cuántas veces hacemos cosas presionados por nuestros padres, pareja, hijos o amigos? No estoy proponiendo que dejemos de realizar acciones que hacen felices a los nuestros. Más bien me refiero al abogado que lo es solo porque a su padre le gustaba la idea de tener un hijo con su misma profesión. O a la persona que se compra un gran coche para no ser menos que sus amigos y luego resulta que tiene dificultades para pagar.
Pienso que debemos quitarnos esa obsesión del que dirán, ser fieles a nosotros mismos y hacer aquello que nos gusta.
En El Blog Alternativo: Simplifica tu vida
25 septiembre 2010 13:01
Muy buena la página