Rafa nos envía a El Lector Alternativo Opina un texto del novelista estadounidense John Gardner sobre la sabiduría de la madurez y todo lo que aprendemos en esa etapa de la vida.
Equivocadamente, la sociedad actual potencia y ensalza solamente los valores de juventud, impulsividad, fuego, amanecer y estética «lisa», y castiga con desprestigio social, botox y pre-jubilaciones ociosas el talento interno de la arruga.
Pero el atardecer tiene sus propias virtudes: la independencia de la opinión de los demás, el reconocimiento del propio valor, el sosiego y una comprensión más profunda de la vida.
No hay que temer a los años ni a la veteranía porque están llenos de un PODER que las antiguas sociedades respetaban y que hoy en día podría beneficiarnos a todos.
Estas son las palabras de John Gardner:
Lo que se aprende en la madurez no son cosas sencillas,
como adquirir habilidades e información.
Se aprende a no incurrir en conductas autodestructivas,
a no dilapidar energía por causa de ansiedad.Se descubre cómo dominar las tensiones,
y que el resentimiento y la autocompasión
se encuentran entre las drogas más tóxicas.
Se aprende que el mundo adora el talento,
pero recompensa el carácter.Se comprende que la mayoría de la gente
no está ni a favor ni en contra nuestro,
sino que está absorta en sí misma.Se aprende, en fin, que por grande que sea
nuestro empeño en agradar a los demás
siempre habrá personas que no nos quieran.Esto es una dura lección al principio
pero al final resulta tranquilizadora.John Gardner
15 abril 2009 16:58
Saludos. Un texto sin duda acertado. Habrá que profundizar algo más en este escritor.
Saludos
18 abril 2009 13:50
Estoy leyendo «LA PARADOJA DE LA SABIDURÍA» de Elkhonon Goldberg. En este libro este neuropsicólogo habla de como la mente en contra de la creencia actual puede mejorar con la edad. Es ameno y muy didáctico.
31 julio 2010 01:11
yo lo interpreto de la manera siguiente:
en la juventud se aprende, en la madurez se comprende
8 noviembre 2012 14:27
Es precioso y muy cierto. Esta sociedad está tristemente obsesionada con la juventud. A mí personalmente (27 años) siempre me ha encantado aprender de la gente más mayor, del ejemplo de personas en su etapa de madurez. De hecho, desde siempre me han atraído las personas algunos años mayores. Sin embargo, yo no acepto en estos momentos el envejecer y mucho menos ver envejecer a la gente que quiero. No es una cuestión de físico, eso sería superficial y absurdo. Se trata de lo que el envejecimiento implica: que te queda menos para morir, que cada año que cumples es uno menos de vida y uno más que te acerca a la muerte. Eso me aterra y actualmente vivo en una tortura constante. Incluso me siento culpable por mi edad, por se más joven que otras personas que quiero. Y al mismo tiempo me da pánico pensar que hay gente que será mucho más joven que yo. Que le quedará mucho más por vivir (sí, la muerte no depende de la edad, pero hablo según la dichosa «ley de vida»). Y por supuesto la vida no es maravillosa. Es absurda, injusta y exasperante (estar esperando tu destino, del que no puedes huir: la muerte, y asistir a tu propio declive y al de los que amas).
8 noviembre 2012 14:29
Cuando hablo de atracción por personas algunos años mayores, me refiero a relaciones de amistad, admiración o aprecio…