Muchas veces nos excusamos con mil y una…, excusas. No voy a hacerlo porque no servirá de mucho. Ni lo intento porque seguro que no va a salir bien. A veces optamos por planificar y planificar, hablar y hablar y no hacer nada.
Sí es verdad que una pequeña planificación siempre es necesaria, pero debemos estar abiertos a cambios durante el camino. Después del pensamiento surge la acción, siempre y cuando nos pongamos manos a la obra.
Fotografías: Art, design blog