La ensalada de champiñones macerados con tomates secos es una forma diferente de comer champiñones, la seta más consumida del mundo, en la que disfrutamos de una rica mezcla de sabores y de todas las propiedades del champiñón en crudo, rico en vitaminas del grupo B, no fáciles de encontrar en otros alimentos, y selenio principalmente.
Las ensaladas son una buena oportunidad para aumentar los crudos en nuestra dieta y aprovechar toda su energía viva y enzimas naturales.
Así hacemos esta ensalada de champiñones macerados con tomates secos:
- Unos 300 gr de champiñones crudos
- 50 cl de zumo de limón y 100 cl de aceite de oliva
- 4 cucharadas de perejil finamente picado
- 1 cebolla tierna grande
- 6 tomates secos previamente hidratados durante media hora
- Sal y pimienta
- Lechuga
Cortamos los champiñones en filetes delgaditos y los colocamos en un cuenco al que añadimos la cebolla troceada, el perejil, los líquidos (zumo de limón y aceite) y salpimentamos.
Lo dejamos macerar al menos 1 hora. A más tiempo pasa, más sabor coge y más amarillos quedan los champiñones en vez de blancos, pero esto no es un problema. Lo podemos tener macerando hasta de víspera.
Para emplatar utilizamos un aro colocando un fondo de lechugas y encima los champiñones aliñados. No necesita más vinagreta porque ya lleva los propios líquidos de la maceración.
Para finalizar rehogamos en una sartén antiadherente sin aceite, o con un mínimo, los tomates secos en trocitos un minuto y espolvoreamos encima de la ensalada.
OPCIONES: la receta original incluía tiras de jamón serrano pasadas por la sartén. Para hacerlo vegetariano podemos emplear estos tomates secos, avellanas tostadas en trocitos, nada o lo que se nos ocurra.
En todas las versiones, los champiñones macerados en crudo son una receta muy fácil para tener en cuenta en nuestro recetario sano junto con las otras recetas de champiñones: crema, empanadillas, salsa, …