«Los padres debemos ganar seguridad en nosotros mismos
y tener claro que el sentido común y el AMOR han sido y serán
los manuales pedagógicos más importantes en la educación
porque los niños siguen viniendo al mundo sin manual de
instrucciones y cada individuo es único»
Prado
“Los padres frente a la sociedad actual” es el título de un breve artículo que Prado, quien ya nos envió un interesante texto sobre «¿Por qué no funciona el Secreto?”, escribió para una revista escolar y tuvo muy buena acogida, por ello lo comparte con nosotros en El Lector Alternativo Opina.
Prado es logopeda, maestra y kinesiologa con más de 20 años de experiencia y trata a diario con familias en su centro Gabinete Prado de Castelldefels (Barcelona).
Este texto, en la línea que expresamos en “Radiografía de la educación” nos habla de responsabilidad, de amor y equilibrio.
LOS PADRES FRENTE A LA SOCIEDAD ACTUAL
Todas las personas antes de ser padres tienen una idea muy clara de cómo quieren educar a sus hijos; la inmensa mayoría quiere que sean tolerantes, respetuosos, educados y creo que ningún padre quiere que sus hijos sean violentos, viciosos, egoístas, malvados.
Sin embargo, cuando los niños están con nosotros todas nuestras buenas intenciones acaban en saco roto porque la presión social es muy fuerte y nuestro miedo a causarles traumas, además de nuestro sentimiento de culpabilidad (por no estar más tiempo con ellos, por no comprarles lo que piden, etc) hacen que no seamos firmes en nuestros criterios, que hoy le podamos permitir lo que ayer le prohibimos y amparándose en toda esta falta de coherencia y sentido común está la televisión, el cine, los videojuegos con la política de ganar dinero sin importar a costa de quien sea y por supuesto, son nuestros niños los que están sometidos constantemente tanto en programas de entretenimiento, como en películas, dibujos animados o videojuegos a una violencia física o verbal escandalosa, donde prima la falta de respeto a los demás.
El querer llevar la razón solo porque gritas más, donde la burla, el sarcasmo, la vulgaridad, las malas maneras son la norma común en series, películas, programas de debate, magazines, etc.
Los hijos piensan que los padres son unos anticuados si no les dejan jugar a determinados videojuegos o ver según que programas y los padres sienten que están solos frente a un gigante demasiado fuerte y peligroso.
Pero, por suerte la influencia de la educación sigue siendo muy importante y los mensajes transmitidos por los padres se graban muy fuertemente gracias al AMOR.
Los niños necesitan las pautas, las normas, necesitan tener las cosas claras y saber que sus padres son inamovibles y es por eso que constantemente nos están probando para asegurarse que pueden fiarse de nosotros porque somos su punto de referencia, si eso es así, cuando tenga problemas importantes acudirán a contárnoslo y confiaran plenamente en nosotros.
Los padres debemos ganar seguridad en nosotros mismos y tener claro que el sentido común y el AMOR han sido y serán los manuales pedagógicos más importantes en la educación porque los niños siguen viniendo al mundo sin manual de instrucciones y cada individuo es único.
Debemos recobrar la ilusión por transmitir valores a nuestros hijos y no delegar en la escuela o en la sociedad.
Hemos de ser coherentes y mantenernos firmes en nuestros criterios, (aunque éstos ya no estén de moda) sin complejos, ni sentimientos de culpabilidad. En definitiva, debemos encontrar el equilibrio entre la tiranía de antaño y la permisividad actual.
Prado
En El Blog Alternativo: Educación
28 septiembre 2009 15:33
Estoy de acuerdo. Y me parece clave algo que apunta al final: recuperar nuestra confianza como padres. Es verdad que las pautas educativas van como por modas. Hacemos caso a un tipo de crianza basada en métodos conductistas o nos decantamos por dejar a nuestros hijos en nuestra cama? Yo creo que durante décadas ha imperado un tipo de crianza basada en el autoritarismo que trataba a las madres casi como si fueran niñas también y que buscaba educar al bebé y a la madre en aras de una sociedad estructurada y ordenada y otros fines políticos que no vienen al caso. Una crianza tan alejada del amor y del instinto que los padres se han sentido equivocarse una y otra vez, frente a falsos modelos publicitarios de padres, hijos, familias perfectas. Estamos recuperando un tipo de crianza basada en el amor y el respeto. Ya no nos equivocamos tanto porque actuamos desde nuestro instinto más profundo, desde nuestra sabiduría interior. Y si nos equivocamos, podemos pedir disculpas y volver a intentarlo; nuestros hijos son los guías. Vamos reaprendiendo y reconociendo como propios, valores que no se nos estaban permitidos y comenzamos a disfrutar de ellos.
30 septiembre 2009 14:00
Gracias Prado por ayudarme a seguir apostando a la educacion, el respeto,el cariño y la confianza… a veces como bien dices cuesta mucho luchar contra una corriente negativa cada vez mas grande, comandada por el consumismo y el agotamiento social. El clan familiar se ha perdido, los compromisos sociales estan a la orden del dia y desbordados, la sociedad está agobiada de obligaciones y los padres de hoy por consiguiente solo quieres librarse de sus hijos. El colegio paso de ser un aporte educativo a un desahogo de adultos. Pretenden cumplir con ellos mediante premios o regalos o chantaje emocional (táctica que aprenden los niños inmediatamente). Sin darse cuenta que en el fondo lo que buscan los niños es llamar su atención pero no con juguetes o premios sino con estar, jugar y compartir. A mi me pasa muchas vecs con mi hija, solo que lo veo gracias a la terapia realizada sobre estos temas. Y como tambien bien dices, el AMOR y el SENTIDO COMÚN es a lo que hay que apuntar… Pues es lo que trato de hacer cada dia. Gracias por ayudarme a ver que no estoy equivocada. Creo que hay un número grande de padres que esta empezando a ver esto desde otro punto de vista pero falta mucho todavia. Por eso son necesarios mas de estos artículos.
Muchas gracias!!!
30 septiembre 2009 17:56
Me critican porque yo NO quiero que mi hijo de 4 años me Spiderman (dibujos violentos).
Me dicen: «Todos los de su clase lo ven».
Yo respondo: «Ya tendrá tiempo de aprender lo que es la violencia, venganza, envidia, cuando tenga edad para razonar sobre ella».
Si no es correcto comprar a tu hijo un consolador de juguete, tampoco una pistola de juquete.
NO debemos enseñarles que jugar a la violencia es divertido.
2 octubre 2009 18:29
Escribí este artículo en el 2003 para una revista local cuando mi hijo tenía 8 años. Viendo como me sentía sola delante de una situación que no había deseado ni soñado: estaba educando a mi hijo como no quería hacerlo y me sentía impotente delante de un monstruo demasiado grande y peligroso, porque yo podía tener valores de Amor, respeto mutuo, cuidar las palabras para no ofender gratuitamente a otros…etc, pero cuando se relacionaba con los demás, cuando veía películas, videojuegos, programas de televisión era como si mis valores estaban pasados de moda y el niño rechazaba todo lo que yo trataba de inculcarle. Decidí que tenía que seguir fiel a mí misma aunque eso significase una pérdida de su reconocimiento hacía mí y fiarme solo del sentido común y el amor, por ello le permití que jugase hasta hartarse de los videojuegos y que viese las películas que a mí me helaban la sangre, pero seguí sistemáticamente apostando por el respeto mutuo porque
suponía que el Amor es más fuerte que todo y decidí apostar por ello.
Hoy mi hijo tiene 14 años y es el niño que yo había deseado educar muchísimos años antes de que naciera: todo lo que le he transmitido lo tiene incorporado y aunque trata de ser rebelde( normal por la edad) estoy muy orgullosa y satisfecha de la educación que le he dado.
2 octubre 2009 20:29
Gracias por compartir tu experiencia como madre! Es bueno que quienes ya recorrísteis el camino, nos lo iluminéis un poquito a quienes vamos por detrás. Es cierto que la familia amplia y el clan se ha perdido en gran parte hoy en día,pero el milagro de internet hace que quienes perseguimos los mismos sueños no nos sintamos solos y a oscuras en el difícil camino. Me gusta pertenecer a esta gran familia cibernética.:D
5 octubre 2009 15:21
Gracias Prado por tu aportación.
Pero, ¿no los vuelve un poco sádicos los videojuegos?
En mi época disparaba a naves desconocidas y ahora los gráficos permiten descuartizar metódicamente a tu contrincante.
5 octubre 2009 17:23
Pues gracias a Dios los seres humanos aún sabemos discernir y los chicos tienen muy claro que son muñecos y aunque a nosotros nos revuelva el estómago ver como no salen a jugar y prefieren estar sentados frente a la maquinita o se pasan horas conversando en interner con amigos que luego en el patio del cole no se cruzan una palabra. Tenemos que aceptar que el «gigante» es demasiado fuerte y peligroso y que la manera de luchar contra él es el sentido común y el AMOR. Si yo me hubiera posicionado frontalmente en aquel momento solo hubiera conseguido que me ignorara y hubiera perdido mi credibilidad ( en mi caso su padre estimulaba y lo potenciaba pues jugaban juntos a juegos de guerra y estabamos separados). Lo eduqué como he expuesto en el artículo: Le permití y hastá llegué a jugar con él( aunque a juegos no tan violentos) pero fuí muy clara con las pautas. Cuando le castigaba buscaba castigos que pudiera cumplir y nunca se los perdoné. Intentaba que cuando estuvieramos juntos fuera muy divertido y los fines de semana procuraba salir a caminar al campo…bueno, como vosotros intentais hacer.
Solo es necesario sentido común y AMOR y cuando lleguen a la adolescencia vereis que diferencia
5 octubre 2009 18:57
Bueno, más violentos que los videojuegos son los cuentos tradicionales: Caperucita, Blanca Nieves, La Cenicienta, Hansel y Gretel… Y han sido y son los favoritos de los niños de ayer y de hoy. Más que el significado literal hay que buscar el significado simbólico que es muy profundo y rico.