Estamos en un país en el que se celebran numerosos botellones, en ciudades pequeñas, medianas y grandes. Se bebe alcohol hasta que el cuerpo no puede más. Pero, ¡cuidado!, esta forma de «ocio» puede sustituirse por algo que es muchísimo peor para los que mueven los hilos del mundo, están apareciendo los adictos al libro. Invaden todos los parques y no pueden parar de leer y leer. Cada vez habrá más jóvenes con criterio propio y que abandonen el rebaño. Para algunos pocos puede ser una situación horrorosa.
Este vídeo es un extracto, que no tiene desperdicio, del programa televisivo «La hora de José Mota».
16 enero 2010 13:49
¡Siempre! he sido fan de Jose Mota, esa parodia del botellón me encantó, esa y otras, porque también se mete con la politica, etc.
Si hay que ir se va, no es por no ir…… :)