«Shakti apareció en la cima del Kailash y encontró a su Shiva en profunda meditación. Lo miró un rato antes de empezar a bailar una danza muy lenta, con suaves movimientos espontáneos. Giraba y giraba y giraba alrededor de Shiva, con su Tandava irradiando de belleza y sensualidad»
Surya Baudet
(Artículo de Surya Baudet, divulgadora del Shivaísmo Tántrico de Cachemira a través de yoga, danza y masajes, sobre la leyenda de Tandana, danza meditativa muy lenta)
En la mitología Tántrica se dice que Shiva es el creador del yoga, de la música de la danza y del arte del Amor.
Aprovechando de sentirse con una energía juvenil, Shiva se puso a bailar Tandava, la danza de la totalidad, con una fuerza desmesurada. Su baile era tan poderoso que de un movimiento de brazos partía las montañas, su aliento se llevaba las cosechas, cada vez que desplazaba un pie vaciaba océanos o lagos o hacía explotar un volcán dejando todo hecho un caos. Se sentía como un adolescente alegre y muy contento de sí mismo.
Shakti estaba mirándolo con cariño pensando: “¡Vaya energía que tiene mi Shiva! Un poco descontrolado, hay manera de bailar Tandava sin destrozarlo todo. Que haga sus experiencias, ya vendrá el tiempo de enseñarle otro camino.”
Shiva tiene ritmos cósmicos; puede estar cien millones de años tocando la Rudra Veena su instrumento favorito y después sentarse en la cumbre del Monte Kailash meditando cien millones de años o bajar en los valles y hacer el amor con las pastoras por cien millones de años. Así que después de su Tandava desencadenado, tuvo ganas de meditar. Se manifestó en la cima del Monte Kailash y se sentó a meditar por cien millones de años.
Mientras tanto la Shakti estaba a lo suyo. Un día le viene ganas de hacer el Amor con su Shiva. Ella apareció en la cima del Kailash y encontró a su Shiva en profunda meditación. Lo miró un rato antes de empezar a bailar una danza muy lenta, con suaves movimientos espontáneos. Giraba y giraba y giraba alrededor de Shiva, con su Tandava irradiando de belleza y sensualidad.
Después de cientos de miles de años, Shakti se dio cuenta que su danza tenía algún efecto en Shiva, pues su magnifico lingam se alzaba hacia el cielo. Shakti se dejó deslizar sobre el lingam de Shiva para hacer el Amor cien millones de años.
La tradición Shivaíta Cachemiriana siendo muy femenina y se ha quedado con el Tandava de la Shakti mientras otras ramas tántricas como Ananda Marga ejecutan el Tandava de Shiva.
Surya Baudet
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