
Estamos en la era de la información y la conexión. Internet y los llamados smartphones hacen que podamos hablar con un amigo que está en la otra punta del mundo. También saber qué tiempo hará mañana, buscar unos datos para los deberes de tu hijo o comprar cartuchos para la impresora. Toda esta información, o mejor dicho, este acceso sencillo a la misma está muy bien y es positivo. Pero también tiene sus inconvenientes. Esta sobreinformación e hipercomunicación provoca que pasemos horas y horas conectados a las redes sociales o navegando por internet, que seamos interrumpidos por llamadas telefónicas continuamente o que ver el correo electrónico sea una obsesión constante. Para aprovechar el tiempo atento a estos consejos.
Todo el día en Facebook y similares
Antes tenáimos bastante con contestar los mails desde el ordenador de casa. Pero ahora hemos instalado el Facebook y el WhatsApp en el Smartphone (si me oyese mi abuela diría «Hijo, ¿de qué estás hablando?») y estamos ciertamente enganchados. En cualquier reunión hay personas que interactuan con la pantalla táctil del teléfono cada 5 minutos, intentando atender a la conversación online y a la offline
Navegando por el océano de internet
A veces nos pasamos tiempo y tiempo navegando por internet. Buscamos información sobre el hábitat de los chimpances y, después de varios enlaces y bastantes minutos, acabamos leyendo la crítica de la película que se estrenó el fin de semana pasado. También gastamos gran cantidad de tiempo cuando hacemos compras por internet, yendo de tienda en tienda. Menos mal que existen portales como Curiba.es en los que encuentras en un solo lugar todo tipo de productos.
Mirando el correo electrónico compulsivamente
Eso de estar ver el correo electrónico continuamente creo que es una «epidemia» muy extendida. Se ha llegado al punto de que algunas personas creen que por escribirte un correo estás en la obligación de verlo en ese mismo momento, dejar todo lo que estás haciendo y contestar inmediatamente. El email es uno de los ladrones de tiempo más efectivos. Después de mucho tiempo he llegado a la conclusión de que si quieres aumentar la productividad lo mejor es tener el correo cerrado y consultarlo unas pocas veces al día, dependiendo de tu actividad. Al fin y al cabo no hay nada que no pueda esperar unas horas. Si quieres hacer las paces con tu bandeja de entrada te aconsejo leer estas recomendaciones.
Suena el teléfono
Con el teléfono ocurre algo parecido que con el correo. Si no andas con cuidado la interrupción es constante. Cuando realices una tarea que requiera cierta concentración lo mejor que puedes hacer es desconectar el teléfono. Ya que si no lo haces seguro que aquello que ibas a hacer en una hora se convierte en varias, y con una pérdida de eficiencia y calidad considerable.
Luchar contra los ladrones de tiempo es complicado pero no imposible. Poco a poco se puede aprender a aprovechar lo bueno de la era de la sobreinformación e hipercomunicación y desechar lo negativo.
5 mayo 2014 23:50
Está súper interesante, pero «realizes» se escribe con «c»…
6 mayo 2014 10:17
Muchas gracias por la corrección, ya lo he cambiado.
19 mayo 2014 04:59
me parece muy interesante, ya que es el día a día de las personas en la actualidad y que creemos que no hay una vida real que vivir, nos enfocamos en la tecnología sin darnos cuenta que esto nos roba el tiempo que podemos aprovechar con la familia o invertirlo en algo de provecho.