
A diferencia de la energía proveniente de combustibles fósiles como el carbón, petróleo o gas natural, la fotovoltaica depende exclusivamente de la luz solar, no produce emisiones tóxicas y no requiere el consumo de otros recursos naturales. Todo ello la convierte en la energía más limpia, económica y sostenible del mundo, cuyo uso permite obtener electricidad sin contaminar el planeta ni crear el efecto invernadero tan perjudicial para el medioambiente. En la mayoría de los casos se trata de un sistema fotovoltaico conectado a la red de una vivienda o de un grupo de edificios para abastecerlos de energía eléctrica gratuita y contribuir al ahorro económico de las familias.
Esto se debe a que toda la electricidad generada por las placas solares se almacena y se consume en el propio hogar, permitiendo reducir el uso de la red eléctrica general. Además de ahorrar hasta el 90 % de la factura de luz, un sistema fotovoltaico incluye una batería de acumulación de energía para que los habitantes de la casa puedan recurrir a ella en ausencia de la luz solar. Y por las noches, la electricidad sobrante producida durante el día puede emplearse para la recarga de vehículos eléctricos, contribuyendo con ello a un mayor ahorro familiar.
Fácil instalación, poco mantenimiento, cero contaminación acústica
Hace años la instalación de los paneles fotovoltaicos en España era poco rentable debido a la existencia de un gravamen popularmente conocido como “impuesto al sol”. Este último reconocía el derecho de las familias a consumir sin cargo hasta 10 kW de energía eléctrica que ellas mismas producían, al tiempo que las obligaba a pagar una cuantía si el consumo sobrepasaba este límite. Todo cambió en 2018, cuando el impuesto al sol fue derogado y los hogares españoles han obtenido el derecho a consumir de forma gratuita hasta 100 kW de energía fotovoltaica al día. Al mismo tiempo se han simplificado los trámites administrativos para particulares y comunidades de vecinos, especialmente para aquellos que tengan instalaciones de autoconsumo de poca potencia. También han desaparecido todas las restricciones en cuanto a las medidas de un módulo fotovoltaico. De esa forma los paneles solares no solo pueden tener cualquier tamaño sino que deben ocupar la mayor superficie posible para sacarles el máximo provecho..
La instalación de un sistema fotovoltaico es rápida y sencilla. En la mayoría de los casos, los paneles solares se enganchan a las estructuras ya existentes de un edificio o, como mucho, requieren obras menores. El funcionamiento del módulo también es muy sencillo. Una vez instalado, comienza a transformar la luz solar en electricidad apta para consumirla de forma inmediata o bien para almacenarla en una batería de acumulación para su uso posterior.
Además de contribuir a la pureza del aire, el agua y el suelo, las placas solares son resistentes al viento, la lluvia, el granizo, las temperaturas extremas y otras inclemencias del tiempo. Es por ello que un sistema fotovoltaico suele tener una larga vida útil que oscila entre 25 y 30 años. Otra gran ventaja de los paneles solares es que su funcionamiento es totalmente silencioso. Esto se debe a que su modo de producir electricidad no es mecánico sino fotoquímico y se basa en procesos que transcurren silenciosamente dentro de cada una de las células fotovoltaicas del módulo.
Completamente reciclables, los paneles solares requieren muy poco mantenimiento, ya que la propia lluvia se encarga de limpiarlos de forma periódica y eficiente. Además, su superficie cuenta con una película antiadherente que actúa como una barrera protectora contra la acumulación del polvo y la suciedad. No obstante, en caso de existir algún tipo de contaminación, se puede limpiar fácilmente con un chorro de agua y una escoba de pelo suave.
23 octubre 2020 12:17
Muy interesante
23 octubre 2020 13:29
Me encanta
25 octubre 2020 20:14
Un artículo súper interesante. Ojalá se legislara para favorecer aún más instalación de estas placas en tantas comunidades de vecinos como fuera posible, porque aunque se han hecho avances aún no es una tecnología sencilla de instalar en según que edificios, y los trámites burocráticos son algo tediosos. Cada vez que veo en mi edificio venir el camión que llena el depósito de gasoil me entristece pensar en toda la energía solar que estamos desperdiciando.
31 octubre 2020 18:28
Buen artículo con un tema candente hoy en día. La búsqueda de otras fuentes de energía, como los paneles solares, es algo muy necesario al tener la posibilidad de usar energías renvables.
Esperemos que sea una tendencia para el futuro.
Saludos.
16 febrero 2021 12:23
Lo importante de la energía fotovoltaica es la reducción que hace en las emisiones de CO2 a la atmosfera además del ahorro económico en la factura de la luz