
Sus equipos electrónicos no están exentos de microbios, un estudio acerca de cuáles son los equipos que pueden almacenar mayor cantidad de bacterias, tres nombres conocidos saltan a la palestra: la Play Station, la Nintendo Switch y la Xbox. Las consolas más vendidas del mundo en el competitivo mercado de los videojuegos. Todo ello, se recoge y analiza de forma exhaustiva en una infografía del casino online Betway.

Veamos lo que dice el microscopio sobre los mandos, las palancas y los botones disparadores de estos dispositivos que son acariciados por las manos de los gamers una y otra vez durante tres, cuatro, cinco, seis, siete, u ocho horas seguidas.
El liderazgo del mercado de la Play Station en el mercado se replica exactamente igual a la hora de medir el número de bacterias que pueden almacenar estos dispositivos a la hora de un conteo microscópico.

Por ejemplo, las palancas de mando de los Play pueden almacenar 190 bacterias que van desde Bacillus SP, Estafilococos y Moho, la mayoría de ellas infecciones de la piel que, aunque no son tan peligrosas un exceso de exposición ante ellas, y vaya que se pueden pasar horas en las consolas, podrían traer problemas.
En el caso de la Xbox, producto de Microsoft, las bacterias se concentran entre sus mandos y sus palancas, pero descienden notablemente en los botones disparadores, alcanzando 15 bacterias.
En el estudio microscópico la que registró menor número de microbios es la Nintendo Switch, con un comportamiento muy parejo entre sus mandos, sus palancas de mando y sus botones disparadores que se sitúan entre 55 y 63 bacterias.

Al margen del capítulo de videojuegos, el reinado de las bacterias en equipos electrónico lo tienen bien ganado los ordenadores. Sus ratones son el reinado de Bacillus y Estafilococos, las dos principales bacterias que se consiguen en ellos.
En el caso de los Bacillus, en la mayoría de los casos no actúan como agentes patógenos, mientras los Estafilococos forman parte de la flora microbiana normal de los seres humanos y pueden causar infecciones supurativas, no obstante, tampoco se considera un patógenos.
La limpieza de estos equipos también está al alcance de la mano, una rutina semanal de desinfección debe formar parte de su aseo.
