
A la hora de elegir paneles solares, hay una gran cantidad de aspectos que se deben tener en cuenta para acertar de una forma plena. Muchas veces se pasan por alto aspectos como el tamaño o la pureza de los materiales empleados en su fabricación, dos cosas muy importantes que vamos a analizar con detalle.
Cuestión de tamaño
Si montas paneles solares para evitar el alto precio diario de la luz, que puedes ver en esta web, hay una cuestión que te va a asaltar rápidamente: qué espacio tienes disponible y cuánto miden los paneles.
Hay que tener presente que no existe un tamaño estandarizado de los paneles, por lo que cada fabricante tiene unas medidas propias dependiendo de sus tecnologías. Eso sí, lo normal es que midan en torno a 1,7 x 1 metros, siendo estos los más comunes en las viviendas particulares.
Pero no son los únicos y, realmente, tienes que ajustar bien el tamaño que tengas disponible para optimizar la producción de energía. A veces se piensa que los paneles de mayor tamaño son los que más energía producen. Y es así, pero hay ocasiones en las que se tiene que elegir entre un panel grande o dos pequeños y este último caso suele ser el de mayor rendimiento energético.
Con todo, lo mejor es siempre confiar en el consejo de los expertos para que sean estos los que te despejen las dudas sobre el tamaño del panel solar que necesitas, ya que cada espacio tiene siempre unas necesidades diferentes.
Los tipos de panel
Ahora bien, no solo el tamaño va a influir en la cantidad de energía que produzcas gracias a la instalación fotovoltaica. Si te has informado, habrás visto que en el mercado hay disponibles paneles monocristalinos y policristalinos. La elección de un tipo u otro tiene sus pros y sus contras.
El panel que produce una mayor cantidad de energía en un mismo espacio es el monocristalino. Antes de su fabricación, se depura completamente el silicio de la cubierta para que esté libre de otros compuestos, lo que hace que rinda de una forma espectacular.
Por su parte, el policristalino es un panel en el que el silicio se ha vertido en bruto, por lo que cuenta con impurezas que reducen su eficiencia energética. También son más baratos, pero, como te comentamos, no sacan todo el rendimiento que se consigue con los anteriores.
En términos absolutos, elegir los monocristalinos es siempre la mejor opción. Es más, si cuentas con una cubierta con poco espacio, elegir este material te ayudará a paliar en parte el no poder incluir varias placas.
No obstante, siempre hay que pensar en cada instalación de una forma adecuada, algo en lo que es especialmente importante el tipo de uso que se le dará a los paneles y si el ahorro inicial es considerable como sucedería en grandes superficies en las que hay mucho espacio libre para colocar diferentes placas.
Como has podido ver, lo de los paneles solares es cuestión de tamaño, sí, pero también de valorar otras características fundamentales como es la pureza del cristal con el que vienen hechas las placas. Valorando todo en conjunto es como se conseguirá elegir esos paneles con los que vas a conseguir ahorrar y disfrutar de una energía cien por cien limpia.