
Una novela que nos aporta el lenguaje y el conocimiento de la mística al siglo XXI,
una sabiduría universal que nos permite crecer y evolucionar como seres espirituales que somos.
¿Quién no ha vivido una noche oscura del alma?
Son momentos en el que caminamos entre tinieblas, en los que dudamos, tenemos miedo, nos sentimos solos y abandonados.
El origen de esta novela, Mi cuerpo es el desierto, tuvo lugar durante un viaje a Israel en 2011. Al visitar Jerusalén la autora se conmocionó, pero al visitar el desierto de Judea se transformó. A pesar de que siempre tuvo una imagen negativa de los desiertos, pues le parecían lugares inertes y pobres, todo eso cambió cuando puso los pies en ese mítico lugar. De hecho, la primera frase con la que comienza el libro le vino a la mente allí. La escribió y quiso narrar una historia a partir de esa idea.
Diez años le ha llevado escribir esta novela. Esther ha leído e investigado bastante durante estos últimos años inspirándose en los escritos y reflexiones de autores como María Zambrano, Simone Weil, Teresa de Jesús, Maria Jesús de Ágreda, Teresa Forcades, Margarita Porete… “escribir esta historia ha supuesto un viaje maravilloso para mí.”
¿Por qué el desierto?
El desierto es un lugar muy simbólico en las diferentes religiones. Es un espacio en el que uno se retira para meditar, pero sobre todo para desnudarse y conocerse. Es lo que le ocurre a la protagonista de ‘Mi cuerpo es el desierto’, quien no solo se deshace de pensamientos y conductas que ya no le sirven, sino que aprende a valorar y desear otras, anhela alcanzar el amor universal. Y así establece un diálogo con el desierto que no es más que la divinidad, la energía creadora, el universo o como cada uno estime lo definirlo.
“El cuerpo, pese a ser un libro espiritual, también es importante”, nos comenta su autora, de ahí que aparezca en el título: “Un cuerpo es mucho más que un conjunto de órganos, es un trampolín hacia otras experiencias que sin él no podrían vivirse. Y en este libro lo reivindico desde la mística como hacia la propia Santa Teresa de Jesús. ‘Mi cuerpo es el desierto’, el título nos habla de la fusión de lo físico en lo sutil, y viceversa, pero también de lo pequeño y concreto, el cuerpo, con lo universal, el desierto.»
Sobre la autora

https://www.instagram.com/esthercanadascano/
(Nacida en Barcelona)
Periodista de profesión, filóloga hispánica e historiadora de formación.
Escribir es su pasión y publicar su primer libro ha sido su sueño.
Escribe desde pequeña y con ocho y nueve años ya componía poemas. A los trece escribió su primera novela y durante la adolescencia probó con la dramaturgia y siguió con la poesía.
Sin embargo, a partir de los 20 dejó de escribir, sin ningún motivo aparente, aunque con la misma naturalidad, retomó la escritura a los treinta y tantos, cuando volvió a la universidad. Fue entonces cuando comenzó a colaborar para revistas, publicando artículos, primero de historia de las mujeres, luego de cultura y, más adelante de belleza.
Antes de su etapa periodística, trabajó dentro del mundo de la empresa, aunque cuando ha sido realmente feliz, reconoce, fue cuando su trabajo ha consistido en escribir. Ha sido redactora, redactora jefa, editora y creadora de contenido. Ha escrito sobre consejos y tendencias para publicaciones como Marie Claire, Telva, Elle, Hola; redactora en jefe de la revista Vida Estética y Tocado; para Hunter y Herdes Magazine escribía sobre viajes.
“Me considero una persona curiosa y con ganas de conocer el mundo, por eso me he pasado la mayor parte de mi vida estudiando todo tipo de cosas, desde cómo hacer zapatos al social media. Eso me ha llevado a ser una persona polifacética, abierta y empática. Ahora siento que escribir es mi propósito de vida.”