«En el camino del documental nos desprendimos de viejas ideas. Nuestra generación ha crecido creyendo que no había alternativa posible a este sistema. Nos habituaron a ver la injusticia, la desiguldad o la destrucción como parte de un mundo imposible de cambiar. LAS ALTERNATIVAS EXISTEN. Construir una nueva sociedad justa e igualitaria, donde la libertad y el respeto sean sus bases, es el reto que se nos abre ahora por delante. Un reto que debemos afrontar para iniciar nuevos caminos y comenzar así a mirar el futuro de nuevo con esperanza»
6 mujeres, un mes en carretera con una cámara visitando y grabando por España y Francia proyectos alternativos al sistema actual -en agricultura, vivienda, estilo de vida, educación, …- dieron como resultado el documental «Stop. Rodando el cambio».Aunque vió la luz en el 2012, sus mensajes y filosofía están plenamente vigentes y es ahora cuando más esperanza pueden despertar. Así empieza el film:
«Este viaje pretende ser una mirada de ánimo al futuro. Acostumbradas a vivir en una sociedad a la que solo se prevé un futuro gris, inmovil y de difícil cambio, vivimos un momento de acción social que nos impulsó a averiguar si la utopía de la que se hablaba era posible. Este viaje es una búsqueda y un encuentro, mejor aun, es un viaje de búsquedas y encuentros, basados en nuestra propias inquietudes e interrogantes y de respuestas y de ideas ante un planeta herido y una realidad que nos preocupa»

«Stop! Rodando el cambio» fue financiado colectivamente y en su hora y media de duración nos muestra personas más conscientes con la realidad del planeta. Las necesidades humanas y más comprometidas consigo mismas y su entorno. Y con vidas que tratan de ser más tranquilas, auténticas, sencillas y enriquecedoras para la comunidad. Accedemos a:
- ecoaldeas como Matavenero (en León y de la cual existe un documental en exclusivo), Valdepiélagos, Ibort o Aineto
- huertos comunitarios urbanos como La Salamanquesa
- dos pueblos cedidos legalmente en Huesca que autogestionan sus actividades
- fincas ecológicas como La Garma en Cantabria o Permablitz en Barcelona
- asociaciones como Decrece Madrid y Terre & Humanisme
Desde pequeñitos nos imponen una forma de vivir. Incoherente con los principios de la Vida, y que la sociedad sigue sumisamente. «Stop. Rodando el cambio» nos muestra que otro mundo es posible de forma realista. Que se está practicando ahora mismo cerca de nuestra casa y que sumarnos a ella es un ejercicio de decisión personal. ¿Te apuntas?
«Estamos tan focalizados que pensamos que terminamos los estudios, un buen trabajo, ganamos 2000 euros y ya vamos a ser felices seguro. Y eso no necesariamente se cumple siempre. Hay que contemplar otras posibilidades. Igual ganar menos dinero pero estar en el entorno haciendo el trabajo que tu quieres. Con la gente que tu quieres, comiendo la comida que tu quieres»
MATAVENERO: EL PUEBLO DEL ARCOIRIS
29 diciembre 2016 00:00
hola camaradas .estamos juntos en este cambio por medio de la permacultura y agro floresta .
somos un casal con un hijo que vivimos hace 4 anos en florianopolis y estamos queriendo conoser espania principalmente el desarrollo que an tenido las comunidades .queriamos saber si ustedes hacen troca hospedaje y comida por trabajo . nuestro desarrollo laboral es por medio de ebentos (esperiencia somatica roldfin )nos cocinamos para los mismos cocina integral vegetariana .con el uso de semillas ,
desde ya muchas gracias por este blog tan maravilloso !!! saludos de tito ceci y benja !!
25 diciembre 2017 13:23
Buenos días.
He visto el documental y me ha encantado, pero he observado que la mayoría de las personas que viven ese maravilloso estilo de vida son jóvenes sanos o personas maduras sanas. Sin embargo, todos envejecemos y no siempre bien, es decir, con la edad y a veces antes, aparcen los achaques, el dolor, la pérdida de movilidad, la enfermedad. Me gustaría saber cómo se podrían casar este ideal estilo de vida con una atención sanitaria adecuada en función de esos problemas de movilidad, dolor, etc. ¿Cómo o dónde se atienden estos asuntos?¿Cómo se sostiene la cobertura de esas necesidades que son básicas?
A la espera de su respuesta, reciban un saludo muy cordial
Fernanda Pacheco