Hacer galletas está de moda. Sean decoradas con mil y un diseños, cookies o galletas clásicas, la reposteria ha vuelto a entrar con fuerza en las cocinas de las nuevas generaciones que hartas de tanta comida artificial están redescubriendo el placer tras los fogones.
Antiguamente las cocinas eran consideradas el lugar sagrado de la casa, donde tenía lugar la alquimia de la salud y hoy también. Esos grandes espacios donde preparar deliciosas comidas caseras y reunirse con amigos y familiares vuelven a ser aspiracionales.
Dentro de este retorno al hogar, la galletoterapia es hacer galletas para pasar un buen rato. Relajarse o evadirse y disfrutar de algo dulce. En este vídeo la cocinera británica Nigella Lawson prepara una cookies triple chocolate para consolar a una amiga llorosa.
Nosotros las hemos cocinado también en La Cocina Alternativa y las detallamos paso a paso. Son intensas y ricas. Si queremos algo con menos chocolate, podemos degustar estas cookies clásicas y si optamos por algo más sano las cookies de avena y chips de chocolate siempre triunfan.
Hay muchas terapias y formas de levantarnos el ánimo. Pero hacer galletas midiendo los ingredientes, amasando, practicando paciencia con las pequeñas porciones. Disfrutando de los aromas y las texturas, gratificándonos cuando salen del horno y compartiéndolas con seres queridos es una a tener en cuenta.
Y tanto nos habíamos alejado del mundo de la cocina, que mucha gente me pregunta extrañada «¿Las has hecho tu? ¿De verdad que las has hecho tu?»…