«Los estados europeos deberían preocuparse ante todo por la movilidad de sus ciudadanos, más que por uno u otro sector económico en particular. Entonces, si el sector aéreo se verá afectado por un tiempo indeterminado, entonces este dinero que está pensado para las subvenciones, debería ser invertido en alternativas»
Pero ¿qué alternativas existen actualmente para evitar volar?»
Valentina Thorner da Cruz
Ya lo avisó el experto Jeff Rubin en su obra «Por qué el mundo se está a punto de hacerse mucho más pequeño» que analizamos en este artículo: «Lo que puedo predecir es que se acabaron los vuelos de los londinenses a Barcelona para disfrutar de una noche de juerga«.
Pero ha sido un volcán quien, en el tecnológico siglo XXI, ha puesto en jaque al sector aéreo y a los viajeros y nos obliga a reflexionar sobre nuestros hábitos de transporte y de vida.
Y sobre este tema recibimos un artículo en El Lector Alternativo Opina de Valentina Thorner da Cruz, autora del útil blog «Sostenibilidad y eficiencia: sacar el máximo provecho respetando el medio ambiente», en el que critica las ayudas establecidas y sugiere otras alternativas, pero de esas incómodas que nos hacen volver a tocar tierra y ser conscientes de que la globalización no puede ser irse a tomar el sol al otro lado del mundo…
Así nos lo explica Valentina:
Hace casi 6 semanas que el volcán Eyjafjallajokull en Islandia provocó una nube de cenizas que causó la cancelación de 5.000 a 6.000 vuelos en Europa. Pocos días después se escucharon las primeras peticiones de ayuda del estado desde las aerolíneas lo que resultó en un plan de rescate para este sector, comparable con el plan de ayuda para los bancos.
Resulta que los bancos fueron personas y causas sintéticas que desencadenaron la reacción. Mientras los problemas del sector aéreo han sido provocados por una erupción volcánica, o sea, un fenómeno natural. Además, este volcán muy probablemente seguirá con su actividad durante unas décadas más. Quizás subvencionar las aerolíneas no es la mejor solución para un problema de tal magnitud.
Los estados europeos deberían preocuparse ante todo por la movilidad de sus ciudadanos, más que por uno u otro sector económico en particular. Entonces, si el sector aéreo se verá afectado por un tiempo indeterminado, entonces este dinero que está pensado para las subvenciones, debería ser invertido en alternativas.
Pero ¿qué alternativas existen actualmente para evitar volar?
1) NO VOLAR
En caso de reuniones de negocios se puede optar por teleconferencias para reducir la necesidad de reunir todo el mundo en persona. Para los viajes de vacaciones se pueden reconsiderar los destinos en favor de destinos más cercanos que son accesibles vía otros medios de transporte (vale recordar que los vuelos de larga distancias no se ven afectados a no ser por los vuelos de conexión dentro de Europa).
2) ESCOGER TRANSPORTES ALTERNATIVOS
Si no puedo ir a Madrid en avión, pues voy en AVE. Pero el AVE todavía no llega a todos los rincones tal como lo hace el avión. Y las conexiones con otras metrópolis dentro de Europa están todavía peores, y sobre todo, nada competitivos en cuestión de precios. Es aquí que los gobiernos realmente pueden hacer una diferencia.
En vez de ampliar la concesión de ayudas públicas a las compañías aéreas, habría que impulsar las obras de infraestructura en tierra, en vez de recortar el presupuesto en este campo.
Recortar siempre es fácil, pero a largo plazo la economía se ve en desventaja. Y por una vez, la ecología está de acuerdo.
Pero quién sabe, quizás con un poco más de aliento, el volcán tendrá la última palabra.
Y yo ya tengo un billete de AVE a París.
En El Blog Alternativo: Artículos sobre viajes
24 mayo 2010 11:23
La Naturaleza es sabia…, y si nosotros no somos capaces de cuidarla…, ella, naturalmente, se defiende!!…
Muchisimas Gracias a El Blog Alternativo, desde que os descubri, he crecido más, me ha reforzado y ampliado con creces mis creencias y un larguísimo etc, de otras muchas cosas positivas!!. Saludos!!.