Cuento sobre nuestra estima a los animales de Paulo Coelho: ¿Cielo o infierno?

, , 7 Comments

perros4 - Cuento sobre nuestra estima a los animales de Paulo Coelho: ¿Cielo o infierno?

“Podemos juzgar el corazón de un hombre según trata a los animales”
Immanuel Kant

El 4 de Octubre se celebra desde 1931 el DÍA MUNDIAL DE LOS ANIMALES en homenaje a San Francisco de Asís, patrón de los animales y el medioambiente, y su relación de respeto y admiración hacia todos los seres vivos y la Naturaleza.

Él vivió en el siglo XIII y como nos tenemos como sociedades más civilizadas que las medievales, cabría pensar que esta filosofía animalista se ha mantenido y ha aumentado con los siglos.

Sin embargo, no existe precedente en la historia de otra época en la que se haya causado tanto sufrimiento a los animales como lo la actual: fábricas de carne que trata los animales como mercancía con el objetivo de que sean lo más productivos posibles aun a costa de su salud y la nuestra, torturas en laboratorios de experimentación y resto de la industrias, entretenimiento, piel, … a quienes les es indiferente trabajar con cosas que con seres que respiran y sienten.

El Día Mundial de los Animales es una buena fecha para una reflexión colectiva sobre el comportamiento en el siglo XXI con el resto de las especies, y si es por necesidad, como los primitivos, o por pura inercia-vicio-inconsciencia.

Nuestro trato a los animales influye más de lo que pensamos en lo que nos sucede a los humanos y este cuento de Paulo Coelho titulado «Cielo o Infierno» es una buena metáfora del lugar donde podríamos vivir si nuestras acciones fueran diferentes.

Y hemos elegido una presentación con preciosas fotografías de perros seleccionadas por Ingeniosa en homenaje a los animales domésticos, protagonistas del cuento.

¿Qué preferimos Cielo o Infierno? Pues hay que trabajárselo…

perros21 - Cuento sobre nuestra estima a los animales de Paulo Coelho: ¿Cielo o infierno?

Un hombre, su caballo y su perro, caminaban por un sendero. Al pasar cerca de un árbol gigantesco, cayó un rayo, y los tres murieron fulminados.

Pero el hombre no se dio cuenta de que ya había dejado este mundo, y siguió caminando con sus dos animales (a veces a los muertos les lleva un tiempo ser conscientes de su nueva condición…)

La caminata se hacía muy larga, colina arriba, el sol era de justicia, y todos terminaron sudados y sedientos. Necesitaban desesperadamente agua. En una curva del camino, avistaron una puerta magnífica, toda de mármol, que conducía a una plaza adoquinada con bloques de oro, en cuyo centro había una fuente de donde manaba un agua cristalina.

El caminante se dirigió al hombre que guardaba la entrada:

– Buenos días.
– Buenos días – respondió el hombre.
– ¿Qué lugar es éste, tan bonito?
– Esto es el cielo.
– Pues qué bien que hemos llegado al cielo, porque nos estamos muriendo de sed.
– Usted puede entrar y beber toda el agua que quiera.

Y el guarda señaló la fuente.

– Mi caballo y mi perro también tienen sed.
– Lo siento mucho, pero aquí no se permite la entrada de animales.

Al hombre aquello le disgustó mucho, porque su sed era grande, pero no estaba dispuesto a beber él solo; dio las gracias y siguió adelante. Tras mucho caminar, ya exhaustos, llegaron a una finca que tenía por entrada una vieja portezuela que conducía a un camino de tierra, bordeado por árboles en sus dos orillas.

A la sombra de uno de los árboles, había un hombre tumbado, con la cabeza cubierta con un sombrero, posiblemente durmiendo.

-Buenos días – dijo el caminante.

El hombre apenas respondió meneando la cabeza.

Tenemos mucha sed, mi perro, mi caballo y yo.
-Hay una fuente en aquellas piedras – dijo el hombre señalando el lugar -. Pueden beber cuanto les plazca.
El hombre, el caballo y el perro fueron a la fuente y mataron su sed. A continuación, regresó para dar las gracias.

-A propósito, ¿cómo se llama este lugar?
-Cielo.

-¿Cielo? ¡Pero si el guarda de la puerta de mármol dijo que el cielo era allá!
-Eso no es el cielo, es el infierno.

El caminante se quedó perplejo.
-¡Pero ustedes deberían evitar eso! ¡Esa falsa información debe causar grandes trastornos!

El hombre sonrió:
-De ninguna manera. En realidad, ellos nos hacen un gran favor. Porque allí se quedan todos los que son capaces de abandonar a los mejores amigos…

Vía cuento: blog de Paulo Coelho

Presentación de perros enviada por Ana Blanco

En El Blog Alternativo: Artículos sobre maltrato animal

pinit fg en rect gray 20 - Cuento sobre nuestra estima a los animales de Paulo Coelho: ¿Cielo o infierno?
 

7 Responses

  1. dAni

    5 octubre 2010 15:06

    Tres frase del slide share que encuentro magistrales:
    No existe mejor psiquiatra en el mundo que un cachorro lamiéndote la cara – Woodrow Wilson

    De sólo pensar que mi perro me quiere más que yo a él, siento vergüenza – Konrad Lorenz

    Si un perro no viene a ti después de mirarte a la cara, es mejor que vayas a casa y examines tu conciencia. – Woodrow Wilson

    ¡Más cierto! imposible

  2. María Magdalena

    5 octubre 2010 18:54

    Otra frase, Sin animales no quiero eternidad, y no sé de quien es.
    De todas formas se ha tratado a los animales mal en todas las épocas.

  3. jose miguel

    14 octubre 2010 11:50

    El problema es que cuando nos referimos a animales sólo pensamos en perro y gatos.
    Pero hay muchos animales que son tan valiosos como éstos que están siendo exterminados por su CARNE,LECHE,HUEVOS ….
    Todos tenemos el derecho a vivir, y nosotros podemos vivir sin matar a ningún animal.
    Go Vegan.

  4. Ingeniosa

    15 octubre 2010 19:48

    Hola, soy Ingeniosa y quiero daros las gracias por elegir mi presentación de los perros en el día Mundial de los Animales. Tengo más PPS de animales y de la naturaleza, las pongo a vuestra entera disposición para ponerla en esta página. Saludos cordiales.

Comments are closed.